El día que Schuster jugó en el Sporting (y el que Quini se retiró)

Schuster, Cundi y Quini el día del homenaje a este último el 21 de Agosto de 1987. (Foto: Fundación Quini).

Los más jóvenes no recordarán que Bernd Schuster jugó un partido con la camiseta del Sporting. Los más jóvenes sabrán que Schuster fue recientemente entrenador del Real Madrid y Málaga, entre otros equipos, pero no conocerán su faceta como jugador. Uno de los pocos que ha jugado en Barcelona, Madrid y Atlético de Madrid, y probablemente lo hizo bien en los 3, jugando como líbero o mediocentro, de gran calidad. Eso sí, siempre le acompañó un peculiar y difícil carácter, que entre otras cosas le llevó a abandonar -sin haber concluido- su último partido como blaugrana en taxi y de unas formas un tanto rocambolescas, o a no participar en la selección alemana más que en 21 ocasiones.

Schuster, mediático crack de la época, coincidió con Quini en el Barcelona, con quien trabó buena amistad, de hecho era su habitual compañero de habitación en los desplazamientos. De Quini, dice Schuster que es una de las mejores personas que ha conocido. De hecho, Schuster, durante el famoso secuestro de Quini, llegó a afirmar que no jugaría mientras no regresase Quini.

Aunque a Quini ya le habían hecho un homenaje de retirada en Barcelona, volvió después a jugar en el Sporting, donde se produciría la retirada definitiva en un amistoso que enfrentó a Sporting y Real Madrid, en el Molinón el 21 de Agosto de 1987, encuentro que terminaría con un empate a 2.

Bernd Schuster no quiso faltar a la cita, y aunque pertenecía al Barcelona se enfundó la camiseta del Sporting. Jugó hasta el minuto 61 y le dio un buen pase a Quini, que remató a gol. Buyo, el portero "merengue" de entonces tuvo que emplearse para evitar que el balón no terminase dentro de la portería. Fue sustituido por Zurdi.

En la crónica que recoge el diario El País, leemos un fragmento emotivo de este partido:

Iban 35 minutos y Quini saltó con Buyo por un balón colgado en el área madridista. Buyo lo atrapó y Quini levantó el brazo. Era su última jugada en el área enemiga. Quini recorrió medio campo abrazando a todos los compañeros, del Spórting y del Madrid, que encontraba a su paso, y lo hizo con fuerza especial con Schuster y Hugo Sánchez. Aclamado por la afición gijonesa, y antes de darle el testigo al uruguayo Wilmar Cabrera -el último nueve del Spórting- se echó al suelo y besó el césped. Aún podía seguir jugando. (El País, 22-8-1987)

El caso es que otro grande que también tenía buena amistad con Quini, Maradona, pudo haber jugado también aquel partido, pero un compromiso con su equipo de la época, el Nápoles, frustró que Quini, Schuster y Maradona se juntasen en el Sporting, al menos en un amistoso.

Cartel promocional del homenaje a Quini. (Foto: Fundación Quini).

Fuentes:

http://www.fundacionquini.es/noticias.php?id_noticia=111345662242

http://futbol.as.com/futbol/2008/09/24/mas_futbol/1222237640_850215.html

https://mundocriminal.wordpress.com/2012/07/03/el-secuestro-de-quini/

http://elpais.com/diario/1987/08/22/deportes/556581607_850215.html