Jony en el Molinón. (Foto de archivo de El Comercio). |
Me resulta muy gracioso escuchar a abonados que están muy contentos con los propietarios del Sporting, y que ya lo estuvieron en la anterior etapa en Primera con José Fernández. Ahora, dicen y parecen creer ellos, "ya no es lo mismo", "se van a hacer las cosas de otra forma". ¿Por qué?, pues "porque ya no es el mismo dueño". Que bien, ¿sabrán que Javier Fernández es el hijo de José Fernández. Me temo que si, y aún así creen que las cosas van a ser diferentes al pasado.
La clave para retratar a Fernández Jr. me parece que va a ser Jony. Pretendido por varios equipos de Primera División, entre ellos como sabemos uno de los más interesados es el Betis, Jony podría cambiar de aires si al Sporting le interesa más el rendimiento económico inmediato (osea, hacer caja), que el rendimiento deportivo y económico a más largo plazo.
Quizá a Javier Fernández se le esté pasando por la cabeza hacer un nuevo episodio de "no es Di Stefano". De hecho, he escuchado a algún que otro aficionado decir que Jony "no es imprescindible", que "no trabaja", y cosas así. ¿Ya está la mano negra de los Fernández haciendo opinión en la grada para preparar la venta?. Quizá.
Todo se sabrá en 2016, cuando me parece que se va a descubrir también que no es que Tebas prohiba al Sporting fichar, si no que los propietarios del Sporting tal vez les haya venido de perlas dicha prohibición, tan de perlas que pareciera que se la hubieran puesto ellos mismos...
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